Escuelas Católicas de Andalucía (ECA), organización mayoritaria de la concertada en Andalucía, con aproximadamente 400 centros y 225.000 alumnos, considera que la emisión de informe desfavorable sobre casi la totalidad de las peticiones de concertación de nuevas unidades en Bachillerato y Aulas de Apoyo a la Integración solicitadas por centros de todas las provincias supone una decepción para todos, algo que minimiza lo anunciado en un programa electoral que fue acogido con gran esperanza. Según señaló Rafael García Porras, secretario general de ECA: “Considerado globalmente Bachillerato y las Aulas de Apoyo a la Integración, este año no se diferencia de los peores años en la concertación de unidades. Excepto las nuevas unidades de bachillerato, nada ha cambiado”.

La realidad es que la Consejería de Desarrollo Educativo y F.P. ha emitido informe favorable para el concierto de 4 unidades de Bachillerato (2 en el Colegio San Antonio de Padua de Martos y 2 en el Colegio la Inmaculada de Algeciras), una cantidad ridícula frente a un total de 294 unidades solicitadas por 52 centros en toda la comunidad, tan solo de Escuelas Católicas de Andalucía.

“Los titulares de los centros, los equipos directivos, los docentes y sobre todo las familias se sienten decepcionadas y defraudadas con una resolución que reduce al mínimo las líneas indicadas en el programa electoral presentado y que fueron acogidas con mucha esperanza por el sector”, asegura Rafael García Porras. “Todos los centros que han solicitado el concierto de Bachillerato tenían este nivel en funcionamiento, con demanda de alumnos más que suficiente y con un deseo de continuidad en el propio centro que sintoniza y refuerza el valor de la libertad de elección de las familias”, añade.

Escuelas Católicas de Andalucía defiende que la inclusión de los conciertos educativos en Bachillerato mejoraría la calidad del Servicio Educativo y la equidad en las posibilidades de elección de centros y que, además, es la única vía para garantizar de forma efectiva la libertad de elección de las familias en esta etapa. “Muchos centros que hoy son privados, que desarrollan proyectos innovadores, se convertirían en accesibles y todos gozarían de igualdad de oportunidades de elección”, indica Rafael García Porras. En muchas ocasiones, las familias con hijos en centros concertados con bachilleratos privados se ven obligadas a abandonar su colegio contra su voluntad por no poder hacer frente al coste de dicho estudio.

La concertación del Bachillerato fue una bandera electoral que generó un gran entusiasmo entre todas las familias de la concertada, y que quedó incluido en el anterior acuerdo de gobierno firmado por el Partido Popular y Ciudadanos, y en el acuerdo para la investidura firmado entre el Partido Popular y VOX en enero de 2019. Más recientemente, se volvió a incluir en el programa electoral del Partido Popular (2022). Esta concertación ha sido defendida por la propia Consejera en declaraciones a algunos medios: “Vamos a concertar el Bachillerato en las zonas donde sea necesario”. Sin embargo, tras cuatro años y medio después de la primera promesa electoral, se han rechazado el 99% de las peticiones de conciertos de bachilleratos ya existentes de Escuelas Católicas de Andalucía. Con todo, ECA reconoce que la concertación de estas nuevas 4 unidades de Bachillerato ha supuesto la apertura de un nuevo camino entre la Consejería y los Centros Concertados. Un nuevo camino que abre una vía de esperanza en el futuro.

Esta decepción general aumenta con la poca atención mostrada hacia al alumnado con Necesidades Específicas de Apoyo Educativo (NEAE) y hacia los centros que han solicitado Aulas de Apoyo a la Integración o de Educación Especial que atienden a alumnos con ese dictamen, diagnosticados por los equipos de orientación externa dependientes de las delegaciones provinciales de educación.

En este sentido hay que tener en cuenta además, que la nueva ley de Atención Temprana (BOJA LEY 1/2023 de 16 de febrero y que se publicó el pasado 22 de febrero) hace especial hincapié en la necesidad de coordinación entre los distintos ámbitos implicados (sanitario, educativo y servicios sociales), destacando, desde el punto de vista de los centros educativos las obligaciones que la Consejería debe prestar con especial interés, destacándose el artículo 17, g: “Proporcionar a los centros donde la persona menor se encuentre escolarizada, en el segundo ciclo de educación infantil, los recursos y apoyos disponibles que se consideren en función de la evaluación de sus necesidades y conforme a la normativa vigente de aplicación, en coordinación con los prestados en otros ámbitos, de manera complementaria y no sustitutiva”.

Pues bien, de un total de 173 Aulas de Apoyo a la Integración o de Educación Especial solicitadas en toda Andalucía, la Consejería de Desarrollo Educativo y F.P. ha concedido un total de 8 (7 AAI y 1 EE) es decir, poco más del 5%. “Detrás de cada una de esas solicitudes hay muchos niños con NEAE que también son andaluces y que necesitan una mayor dotación de recursos”, indica el secretario general.

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